¿Para qué sirve la fibra y cómo afecta al correcto funcionamiento del intestino?

La fibra alimentaria está compuesta por partes comestibles de los vegetales que nuestro intestino delgado es incapaz de digerir, pero que, al llegar al intestino grueso, pueden ser fermentadas por nuestra flora bacteriana, que la utiliza como fuente de alimento y la transforma en nuevos componentes que suelen ser beneficiosos para nuestro organismo. De esta forma, la fibra alimentaria ayuda a reforzar el sistema inmune, pero también a controlar los niveles de c-LDL y glucemia, entre otros.

Además, la fibra puede ser soluble, principalmente fermentada y metabolizada por nuestra flora intestinal, o insoluble, capaz de absorber agua y aumentar el volumen de las heces y favorecer el movimiento del material fecal a través del tracto digestivo.1-4

Referencias

  1. Ángeles Carbajal Azcona. Manual de Nutrición. Fibra dietética. Departamento de nutrición. Universidad complutense de Madrid. Madrid. Capítulo 8. Disponible en: https://www.ucm.es/data/cont/docs/458-2013-07-24-cap-8-fibra.pdf
  2. Mayo clinic. Fibra alimentaria: esencial para una nutrición saludable. Disponible en: https://www.mayoclinic.org/es/healthy-lifestyle/nutrition-and-healthy-eating/in-depth/fiber/art-20043983 
  3. FEC. Alimentación. Nutrientes. Fibra. Disponible en: https://fundaciondelcorazon.com/nutricion/nutrientes/837-fibra.html
  4. FHF. Hábitos de vida saludables. Fibra alimentaria. Disponible en: https://www.colesterolfamiliar.org/habitos-de-vida-saludables/dieta-y-nutricion/fibra-alimentaria/